Salud intenta frenar los nuevos paros acordados por los MIR en Navidad
Las asambleas de los médicos residentes aprueban retomar la huelga
La Junta les ofrece poder coger vacaciones si posponen las protestas
Médicos residentes se manifiestan en Sevilla el 19 de noviembre, el primer día de la huelga. / PACO PUENTES
El Gobierno andaluz intenta evitar que la huelga de los Especialistas Internos Residentes (EIR) se reactive en Navidad. Las asambleas provinciales de los médicos en formación, los antiguos MIR, aprobaron el lunes reanudar el paro indefinido el próximo fin de semana ante el fracaso de sus negociaciones con el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Pero los responsables de la consejería les ofrecieron ayer dos opciones para intentar frenar el paro: que mantengan la suspensión de la huelga hasta enero o que la desconvoquen esta semana y la vuelvan a convocar para después de las fiestas.
La huelga de los EIR (alrededor de 4.500 en Andalucía) está suspendida desde el pasado 4 de diciembre, cuando los médicos en formación aceptaron abrir un periodo de negociación con el SAS. No desconvocaron la huelga, sino que la dejaron aparcada con la intención de que, si los contactos con la Administración fracasaban, la retomarían sin necesidad de volver a convocarla oficialmente. Pero los responsables del SAS les han advertido en las últimas semanas de que las suspensiones de huelga no existen legalmente y que la Junta solo ha aceptado esta fórmula para poder negociar. Y ya que el paro sigue oficialmente activo y la posibilidad de coger vacaciones y días de permiso se anula durante las huelgas, los residentes no podrían tomarse días en Navidad.
Lo que primero se vio como una amenaza se ha ido cumpliendo cuando la mayoría de las direcciones de los hospitales y centros de salud han informado a los residentes de que les denegaban los permisos solicitados. La Junta sabe que la posibilidad de tener que trabajar todos los días de Navidad ha pesado mucho para que las asambleas provinciales de los MIR decidieran este lunes retomar la huelga y por eso ayer les dieron dos opciones para evitar el paro.
La primera, la anunció la propia consejera de Salud, María Jesús Montero, tras ser preguntada por el conflicto en la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno: “Les hago un llamamiento para que la desconvoquen hoy o mañana y la vuelvan a convocar después de Navidad”, expuso Montero. Así, advirtió, los MIR podrían disfrutar de las vacaciones que ya hubieran planeado para estas semanas.
Pero casi a la vez que Montero hacía su llamamiento, los representantes de los EIR estaban reunidos en el SAS con los dos intermediarios de Salud en el conflicto: el director general de Profesionales, Martín Blanco, y el de Calidad, Investigación, Desarrollo e Innovación, Jerónimo Pachón. Y ante la nueva amenaza de huelga por parte de los MIR, les ofrecieron poder disfrutar de los días de permiso si mantenían la suspensión del paro, según fuentes del departamento que dirige Montero. Los médicos no contestaron y ambas partes han quedado en reunirse otra vez a primera hora de hoy.
Un seguimiento masivo de la huelga en Navidad dejaría a los hospitales y los centros de salud sin el trabajo de los MIR. Aunque algunos médicos residentes cuestionan la eficacia de un paro durante las fiestas navideñas, cuando se reduce la actividad asistencial y toda la actividad programada, como las intervenciones quirúrgicas. Fuentes de Salud aseguran también que la repercusión de la huelga en el día a día de los hospitales no sería superior en Navidad que en cualquier otra fecha.
Los contactos volverán a retomarse hoy y las dos partes aseguran que quieren alcanzar un acuerdo. La consejera de Salud afirmó ayer que ya se han acercado posturas y existe margen para poder seguir avanzando. Montero lamentó, sin embargo, que la “dinámica” de los residentes, que someten a la votación de las asambleas cada paso en la negociación, “dificulta los acuerdos”. Uno de los portavoces de los EIR, Alberto Amador, confió también en llegar a algún acuerdo antes de este fin de semana que evite la huelga acordada por las asambleas.
La huelga de los EIR (alrededor de 4.500 en Andalucía) está suspendida desde el pasado 4 de diciembre, cuando los médicos en formación aceptaron abrir un periodo de negociación con el SAS. No desconvocaron la huelga, sino que la dejaron aparcada con la intención de que, si los contactos con la Administración fracasaban, la retomarían sin necesidad de volver a convocarla oficialmente. Pero los responsables del SAS les han advertido en las últimas semanas de que las suspensiones de huelga no existen legalmente y que la Junta solo ha aceptado esta fórmula para poder negociar. Y ya que el paro sigue oficialmente activo y la posibilidad de coger vacaciones y días de permiso se anula durante las huelgas, los residentes no podrían tomarse días en Navidad.
Lo que primero se vio como una amenaza se ha ido cumpliendo cuando la mayoría de las direcciones de los hospitales y centros de salud han informado a los residentes de que les denegaban los permisos solicitados. La Junta sabe que la posibilidad de tener que trabajar todos los días de Navidad ha pesado mucho para que las asambleas provinciales de los MIR decidieran este lunes retomar la huelga y por eso ayer les dieron dos opciones para evitar el paro.
La primera, la anunció la propia consejera de Salud, María Jesús Montero, tras ser preguntada por el conflicto en la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno: “Les hago un llamamiento para que la desconvoquen hoy o mañana y la vuelvan a convocar después de Navidad”, expuso Montero. Así, advirtió, los MIR podrían disfrutar de las vacaciones que ya hubieran planeado para estas semanas.
Pero casi a la vez que Montero hacía su llamamiento, los representantes de los EIR estaban reunidos en el SAS con los dos intermediarios de Salud en el conflicto: el director general de Profesionales, Martín Blanco, y el de Calidad, Investigación, Desarrollo e Innovación, Jerónimo Pachón. Y ante la nueva amenaza de huelga por parte de los MIR, les ofrecieron poder disfrutar de los días de permiso si mantenían la suspensión del paro, según fuentes del departamento que dirige Montero. Los médicos no contestaron y ambas partes han quedado en reunirse otra vez a primera hora de hoy.
Un seguimiento masivo de la huelga en Navidad dejaría a los hospitales y los centros de salud sin el trabajo de los MIR. Aunque algunos médicos residentes cuestionan la eficacia de un paro durante las fiestas navideñas, cuando se reduce la actividad asistencial y toda la actividad programada, como las intervenciones quirúrgicas. Fuentes de Salud aseguran también que la repercusión de la huelga en el día a día de los hospitales no sería superior en Navidad que en cualquier otra fecha.
Los contactos volverán a retomarse hoy y las dos partes aseguran que quieren alcanzar un acuerdo. La consejera de Salud afirmó ayer que ya se han acercado posturas y existe margen para poder seguir avanzando. Montero lamentó, sin embargo, que la “dinámica” de los residentes, que someten a la votación de las asambleas cada paso en la negociación, “dificulta los acuerdos”. Uno de los portavoces de los EIR, Alberto Amador, confió también en llegar a algún acuerdo antes de este fin de semana que evite la huelga acordada por las asambleas.
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