jueves, 13 de diciembre de 2012

“Nos hemos adaptado a los nuevos tiempos y a la nueva realidad socioeconómica” :: El Médico Interactivo ::

:: El Médico Interactivo :: “Nos hemos adaptado a los nuevos tiempos y a la nueva realidad socioeconómica”

“Nos hemos adaptado a los nuevos tiempos y a la nueva realidad socioeconómica”

 
Diciembre de 2012 - Jorge Sánchez Franco

El presidente de la Asociación Española de Urología (AEU) ha concedido una entrevista a EL MÉDICO

Humberto Villavicencio ostenta la presidencia de la Asociación Española de Urología (AEU) desde hace tres años, un periodo de tiempo en el que ha conseguido consolidar la sociedad científica como organización, potenciar la formación continuada de los urólogos e impulsar la investigación dentro de la especialidad. Una de sus promesas cuando accedió al cargo fue la de incrementar la presencia de la AEU en el ámbito europeo, y así ha sido. Buena prueba de ello es el estrecho vínculo que se ha establecido con la European Association of Urology (EAU). Además, el pasado 5 de septiembre tomaba posesión de su cargo como secretario general de la Confederación Americana de Urología (CAU), una entidad que le permitirá estrechar lazos con otras sociedades científicas de América y Portugal. Este experto ha dicho de los recortes que están disminuyendo la motivación e implicación del médico especialista con el sistema sanitario.
¿Qué balance hace de sus tres años al frente de la AEU?
Muy positivo. Hemos conseguido implantar una serie de novedades organizativas profesionalizadas acordes con los nuevos tiempos y dirigidas a consolidar la sede de la AEU y la formación de calidad, y nos hemos adaptado a la nueva realidad socioeconómica, que también afecta a las sociedades científicas.
¿Cuáles han sido sus principales logros?
Hemos dotado a la asociación de elementos internos de análisis (proyecto DAFO) para conocer nuestras debilidades y fortalezas, lo que ha llevado al establecimiento de planes de necesidades y líneas estratégicas como son, por un lado, la creación de un instituto de investigación dentro de la AEU y de la Fundación para la Investigación en Urología (FIU), y por otro, la introducción de cambios en la formación continuada que han dado origen a la reorganización de los cursos y reuniones de los grupos de trabajo, agrupándose por patologías afines para optimizar la información, los recursos y la interacción profesional, y dotándoseles de cirugías en directo. También hemos desarrollado y potenciado las vías de comunicación entre socios y elementos rectores de la AEU, como son la página web, las publicaciones en prensa y el boletín electrónico "AEU Today". Paralelamente, hemos impulsado la organización de eventos en nuestra sede para darle mayor visibilidad y familiarizar al socio con lo que es suyo.
¿Y con respecto a la formación continuada?
Con respecto a la formación continuada, estamos capitalizando los cursos de todos los residentes de último año mediante la evaluación externa de un comité de la EAU. Asimismo, el Instituto de Estudios Superiores de la Empresa (IESE), en colaboración con Ipsen Pharma, está impartiendo un curso de alta gestión en Urología, dirigido a profesionales urólogos con responsabilidad directiva (Junta Directiva y órgano de gobierno de la AEU, y jefes de servicios de Urología de toda España). El trabajo en equipo, la gestión de conflictos y la comunicación de los pacientes son los hilos conductores del curso, que también se impartirá en 2013 y se extenderá a líderes emergentes con cargos intermedios. Por otro lado, hemos concluido con éxito los estudios de incidencia del cáncer de próstata en España durante 2010, y del cáncer de riñón y de vejiga durante 2012. Estos registros han supuesto un ejemplo de colaboración multi institucional. En nuestro último Congreso Nacional, celebrado este año en Vigo, presentamos un libro sobre indicadores de calidad en nuestra especialidad, un proyecto de un año de duración que ha contado con la colaboración de la Fundación Avedis Donabedian y Pfizer. Entre sus objetivos cabe citar los siguientes: facilitar la mejora de la calidad asistencial entre los profesionales urólogos, introducir métodos comunes de evaluación, e informar de los sistemas de medidas de calidad que faciliten el desarrollo de planes específicos en los servicios hospitalarios y en la consulta privada. Por último, recordar que en 2011 hemos celebrado nuestro centenario como asociación científica, motivo por el cual hemos entregado a socios e instituciones nuestro libro homenaje a los cien años de historia de la AEU.
Una de sus promesas fue la de potenciar la presencia de a AEU en el ámbito europeo. ¿Se ha conseguido?
Sin duda. No podemos ignorar nuestra pertenencia europea y nuestra integración científica en ella. Hemos logrado establecer vínculos directos entre la AEU y la EAU. Esta relación institucional ha permitido, entre otras cosas, la celebración hace tres años del Congreso Europeo de Urología en Barcelona, y la concesión de una licencia de traducción al español de las guías clínicas europeas. Por otra parte, nuestros residentes socios de la AEU son también miembros junior de la EAU gracias a un convenio firmado entre ambas instituciones, lo que les permite acceder a todas las publicaciones de la asociación europea e inscribirse gratuitamente al Congreso Europeo. Además, los residentes de último año pueden disfrutar de una beca para la realización de un curso de alta inmersión en Urología impartido por la EAU en Praga durante seis días, pudiendo examinarse del European Board of Urology (EBU) a la finalización del mismo. Además, la AEU ha creado dos becas para los mejores exámenes de los urólogos españoles. Para estimular la integración europea anteriormente referida, la AEU ha impulsado la impartición de cursos de formación urológica en inglés para residentes (Rising Stars in Urology) y para jóvenes urólogos (Spanish Urology Talks in English). Fruto de esta estrecha colaboración es la incorporación de urólogos españoles en altos cargos dentro de la estructura organizativa de la EAU, sin olvidar que yo mismo fui nombrado en 2011 Miembro de Honor de la EAU.
¿Qué iniciativas se han llevado a cabo en el ámbito de la formación continuada?
La AEU ha realizado cursos de formación continuada que responden a las necesidades de sus asociados: manejo del cáncer renal metastásico e indicación de nuevas moléculas como terapia de diana celular, manejo del dolor en el paciente uro-oncológico, terapia focal en cáncer de próstata, etc. A esto se unen los doce cursos que, con carácter anual y coincidiendo con el Congreso Nacional, se imparten en la diferentes áreas de la Urología (Urología oncológica, litiasis urinaria, andrología, Urología funcional y femenina, trasplante renal, uropediatría, endourología, laparoscopia y robótica). La AEU también ha coordinado un ambicioso proyecto DELPHI sobre hiperplasia benigna de próstata (HBP) cuyo objetivo ha sido el de consensuar las mejores evidencias disponibles en el diagnóstico de esta patología. Para esta tarea se ha contado con la participación de cincuenta urólogos expertos en la materia de todo el ámbito nacional. El resultado de todo esto ha sido la edición de un libro con dichas evidencias científicas y la publicación de un artículo en Actas Urológicas Españolas. La AEU ha seguido trabajando conjuntamente con las tres sociedades científicas de Atención Primaria (SEMERGEN, Semfyc y SEMG) para consensuar los criterios de derivación de los pacientes con HBP y con incontinencia urinaria del primer nivel asistencial a la consulta del urólogo con el máximo nivel de calidad asistencial. Por otra parte, se está estableciendo una nueva dinámica de formación continuada con el recientemente creado campus virtual, para lo cual se ha externalizado la distribución de cursos de gran calidad, compatibles con cualquier PC, a un precio razonable.
¿Qué otros proyectos tiene previstos a corto y largo plazo?
En 2013 vamos a seguir trabajando en la formación continuada del urólogo en otros ámbitos, como la prevención y tratamiento de la enfermedad ósea en el cáncer de próstata avanzado y mestastásico.  Asimismo, a lo largo del próximo año se llevarán a cabo más de 100 reuniones en toda España con el objetivo de implementar el proyecto AP-InfoCaP, consistente en la elaboración de informes de alta hospitalaria consensuados y establecidos por urólogos que atienden a pacientes con cáncer de próstata, cuyo destinatario será el médico de familia que habrá de continuar con la atención médica de dichos pacientes tras abandonar éstos el hospital.  En 2013 también queremos poner en marcha un estudio que evalúe la calidad de vida de los pacientes sometidos a prostatectomía radical y compararla con la de aquellos otros que son tratados con radioterapia y/o bloqueo hormonal. En la actualidad se están analizando los datos de seguimiento a un año de los pacientes incluidos en las bases de datos del registro nacional de cáncer de próstata, con el objetivo de conocer cómo se maneja esta enfermedad en nuestro país y qué resultados se obtienen. Finalmente, estamos centrados en la construcción de un organismo gestor de la investigación en Urología y en la implantación de una nueva estructura profesionalizada de gestión económico-financiera capaz de hacer rentable y sostenible la AEU.
¿Cuáles son las principales demandas de la AEU a la Administración en estos tiempos de crisis?
El apoyo de las instituciones públicas a las asociaciones médicas es vital para convertir a éstas en impulsoras de iniciativas de docencia, investigación y organización profesional, más allá de sus funciones meramente representativas. Las asociaciones constituyen el foro idóneo para que la Administración consulte y pueda tomar decisiones desde una visión profesional y objetiva.  También pedimos que nos consulten a la hora de gestionar los recursos sanitarios de los pacientes con enfermedades urológicas, mediante la organización de foros, debates o encuentros entre profesionales de la Administración, expertos en gestión clínica y profesionales urólogos conocedores de la realidad asistencial y de la racionalización del gasto sanitario basada en evidencias científicas. Por último, pedimos más apoyo para la figura del médico especialista como líder en la toma de decisiones clínicas y de gestión en el ámbito hospitalario, una tarea que se encuentra actualmente en manos de gestores de perfil profesional no médico y de médicos que nunca han ejercido su profesión.
¿De qué manera están afectando los recortes a la calidad asistencial en el ámbito de la Urología?
Se está disminuyendo la motivación e implicación del médico especialista con el sistema sanitario para el que trabaja, aunque nunca con el paciente. El médico siempre tratará al paciente con la máxima profesionalidad y ética, pero no hay duda de que una situación laboral inestable o la disminución de los incentivos económicos pueden llevar a este profesional a orientar su tiempo hacia otras tareas que le ofrezcan mayores recompensas. Según Ramón y Cajal, el médico trabaja por la ciencia, por su prestigio y por el dinero. Si éste disminuye por debajo de niveles insoportables y no se le dota tampoco de los recursos necesarios, el profesional buscará alternativas que lastrarán su buen quehacer médico, dedicando menos tiempo y menos tecnología en la atención de sus pacientes. Asimismo, si dejan de incorporarse tecnologías tales como la cirugía robótica o el láser, la especialidad se quedará anclada en las prácticas quirúrgicas del siglo XX, lo cual nos alejaría del estándar de calidad de otros países, como Alemania o Estados Unidos. Lógicamente, esta situación puede llevar a los "mejores" o "excelentes" a buscar su pleno desarrollo profesional en otros países, regresando a tiempos pasados de fuga de cerebros. Muchos profesionales están haciendo sacrificios personales para racionalizar y explotar de forma eficiente sus unidades y para que el paciente apenas note las deficiencias, pero eso no bastará si hay desabastecimientos por impagos a proveedores. Esto sí que sería un problema insalvable desde el punto de vista del sacrificio personal de los profesionales.
¿Cómo valora el estado actual de la especialidad de Urología y su encuadre en el futuro decreto de troncalidad?
El programa MIR en Urología funciona muy satisfactoriamente para todas las partes interesadas desde hace más de tres décadas, por lo que antes de introducir un cambio de calado que pueda suponer algún riesgo para el mismo, se debería llevar a cabo un programa piloto en uno o varios hospitales y evaluar sus resultados. La AEU está volcada en la formación MIR de Urología mediante la promoción de cursos dirigidos específicamente a residentes y la convocatoria de ayudas para rotaciones de MIR en centros nacionales y extranjeros, y de premios y becas de investigación que buscan promover la publicación de trabajos científicos. Por tanto, las conjeturas organizativas coyunturales no deben afectar a una especialidad perfectamente consolidada.
¿Cuáles son las necesidades presentes y futuras de la especialidad? ¿Y los retos?
Para conocer estas necesidades, la AEU ha llevado a cabo un proyecto DAFO sobre el presente y futuro de la especialidad, con las siguientes conclusiones: mejoras en la comunicación interna y externa; incremento de los servicios de la página web; publicación de guías clínicas de la especialidad; mayor formación de los urólogos en áreas de gestión; fomento de la coordinación y colaboración de los distintos grupos de trabajo de la AEU en proyectos docentes y profesionales; impulso de la formación on line acreditada de los asociados; mayor uso y aprovechamiento docente de la sede social; y creación de una unidad de investigación propia de la AEU para promover la investigación urológica de calidad. Con respecto a los retos, la AEU debe profesionalizar su estructura organizativa para lograr la viabilidad futura de la institución, más aún en tiempos de crisis. También tenemos que velar por la implantación de la laparoscopia y la robótica como altas tecnologías al servicio del paciente y de su seguridad, teniendo en cuenta la gran dependencia económica de esta cuestión. La investigación debe ser una prioridad y, por lo tanto, los recursos destinados a esta empresa no pueden verse mermados. A este respecto, es imperiosa la creación de un instituto de investigación en Urología, para lo cual contamos con la asesoría de PricewaterhouseCoopers (PwC). También debemos modernizar el sistema de cursos y congresos para garantizar la formación continuada de los urólogos e incrementar la presencia de estos especialistas en los foros de debate sobre gestión clínica. No debemos olvidarnos de formar parte de la EAU y de su órgano de decisión como asociación de pleno derecho, ni de premiar la eficiencia de los equipos.
¿Qué carencias perciben los profesionales en este ámbito?
Una de las carencias más importantes que la AEU ha detectado en su análisis DAFO tiene que ver con la formación en competencias de gestión clínica y liderazgo. Por esta razón, hemos iniciado en 2012 la impartición del curso de alta gestión en Urología anteriormente referido.  También hemos percibido viejas estructuras excesivamente jerarquizadas a todos los niveles, lo cual suele agotar los esfuerzos personales de los profesionales.
¿Qué peso tiene la Urología española en la investigación mundial de la especialidad?
La Urología española está adquiriendo un peso cada vez más relevante en la investigación básica y clínica gracias a un significativo aumento de las comunicaciones científicas a congresos internacionales y de las publicaciones en revistas con elevado factor de impacto. Precisamente, uno de los motivos de esto es la convocatoria anual de becas y ayudas a la investigación que la AEU realiza a través de su fundación, la FIU. En los últimos años se han financiado diferentes proyectos y grupos de investigación españoles, consolidados y emergentes, con una media de 200.000 euros anuales.  La revista Actas Urológicas Españolas, órgano de difusión de la AEU y de la CAU, ha obtenido en 2011 un factor de impacto de 0,45 para los artículos que en ella se publican, y continúa en progresión ascendente. En 2010 pusimos en marcha tres estudios multicéntricos de registro nacional de base hospitalaria para conocer la incidencia de los principales tumores urológicos (próstata, vejiga y riñón). En ellos han participado 25 servicios de Urología de toda España. Los datos recogidos en más de 8.000 pacientes han sido excelentes. Más recientemente, en septiembre de 2012, se han publicado en el British Journal Urology International (BJUI) los resultados del estudio de incidencia del cáncer de próstata en España. Esta información, hasta ahora desconocida en nuestro país, nos permitirá cuantificar la carga asistencial que supone este tumor y planificar adecuadamente los recursos necesarios para su tratamiento. La Urología está especialmente volcada en la oncología y en la calidad de vida de sus pacientes con cáncer de próstata, de vejiga, de riñón y de testículos, hiperplasia benigna de próstata, incontinencia urinaria, disfunción eréctil y trasplante renal. El desarrollo de materiales y de aparataje quirúrgico es otra de las puntas de lanza de la investigación urológica. Aunque todavía queda mucho por hacer, la investigación es hoy en día un aspecto indisoluble de la Urología.
¿Qué otras iniciativas se están llevando a cabo desde la AEU para potenciar dicha investigación en nuestro país?
Estamos configurando una base de datos y una estructura que nos permitan a los urólogos la realización de estudios multicéntricos a nivel nacional, con el asesoramiento estadístico y metodológico necesario para aquellas ideas de investigación que vayan surgiendo. Este proyecto está siendo coordinado por las oficinas de Informática, de Formación Continuada y de Ética de la AEU, Además, desde la FIU se está constituyendo un instituto de investigación con un comité científico propio y directores científicos en las distintas áreas de la especialidad para estimular y potenciar la investigación clínica urológica en España, dotándola de mayor agilidad y eficacia. Queremos acabar con la atomización y aislamiento de los investigadores.
¿En qué ámbitos/enfermedades de la Urología se requiere mayor esfuerzo investigador?
Es importante hacer hincapié en la investigación traslacional de los tumores urológicos para conocer mejor la carcinogénesis y los cambios genéticos que la inducen. También es clave el estudio de los factores ambientales y genéticos que producen el cáncer urológico para poder actuar desde la prevención.  Otro ámbito a tener en cuenta tiene que ver con la fisiopatología, el diagnóstico y el tratamiento de la patología genital de la mujer (vejiga hiperactiva, incontinencia urinaria, cistitis intersticial, etc.). Otras facetas de la investigación van encaminadas a combatir la infección de orina, el rechazo del injerto renal y el metabolismo de la litiasis, sin olvidar las alteraciones sexuales masculinas, como la disfunción eréctil y la eyaculación precoz. Por último, no podemos olvidarnos de la bioingeniería, necesaria hoy por hoy para perfeccionar nuestro arsenal quirúrgico con instrumentos cada vez más finos y precisos.
¿Qué supone su reciente nombramiento como Secretario General de la CAU?
La CAU está constituida por 24 sociedades científicas de América y Península Ibérica (España y Portugal). Esta confederación no sólo está conectada a nivel docente y científico, sino también cultural. La Asociación Portuguesa de Urología y la AEU pertenecemos a la CAU por derecho propio.  El pasado 5 de septiembre tomé posesión de este cargo. Es para mí un honor ser el máximo representante de esta entidad, liderar la formación de calidad en Urología, explotar más la investigación hispanoamericana y ayudar a todos a estar al día en la alta tecnología para un mejor servicio y seguridad de los pacientes.
¿Hay algo que quiera añadir para terminar?
Me gustaría subrayar la fortaleza de la unión entre la AEU, la CAU y la EAU, y destacar los servicios que presta la página web de la AEU (www.aeu.es) a socios, particulares y pacientes. También quisiera hacer referencia a la importancia de los medios de comunicación en la difusión de los eventos y avances científicos de la especialidad.

No hay comentarios: